El gobierno alemán es famoso por sus fuertes leyes de censura y por las medidas enérgicas contra ciertas prácticas comerciales, y esta semana esa tendencia continúa con una nueva legislación relativa a las ofertas de pedidos anticipados de videojuegos.
a sentencia procede del Tribunal Regional Superior de Múnich a raíz de un caso judicial relacionado con la venta anticipada de smartphones. La sentencia se produjo a raíz de una demanda de protección de los clientes presentada por Media Merkt, que había autorizado la venta anticipada de teléfonos inteligentes sin fecha de lanzamiento.
Con la creciente presión ejercida sobre los editores de juegos para que limpien el juego anti-consumidor que son las cajas de botín, estos movimientos no son tan sorprendentes, sólo es extraño que se haya tardado tanto en hacer algo así.
Existe una preocupación legítima en relación con este cambio y su potencial para iniciar una pendiente resbaladiza hacia otras medidas represivas, por lo que queda por ver si otras prácticas vagas en los juegos, como la oferta de Acceso Temprano, recibirán un tratamiento similar.
Al respecto, Wolfgang Schuldzinski, director general de Düsseldorf Consumer, dijo
Cuando los consumidores piden productos en Internet, los proveedores deben especificar para cuándo se entregan los productos.
El mercado de los pedidos anticipados de juegos ha sido un tema polémico durante mucho tiempo, con un montón de cosas turbias que ocurren y son aceptadas como normales por los jugadores. Cosas como sacar contenido del juego principal para ofrecerlo como bono de precompra, o incluir recompensas que alteran la jugabilidad en juegos multijugador que alteran el equilibrio, todas estas y muchas más tácticas han atraído la ira de los jugadores a lo largo de los años. Una de las cosas que más me molestan está relacionada sólo tangencialmente con esto, pero me sigue molestando. Se trata de ofrecer ediciones de coleccionista que no incluyen el juego en absoluto. Que levante la mano el que tenga esa basura derrochadora y sobrevalorada.
No creo que este cambio tenga un gran impacto en el volumen de pedidos anticipados, sólo en la velocidad a la que se ofrecen. Francamente, me alegro de que ocurran este tipo de cosas porque suelen servir de señal para que la industria de los juegos deje de ser gilipollas. Eso, por supuesto, suponiendo que este tipo de regulaciones no interfieran con otras prácticas que en realidad no son problemáticas.
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