Valve ha adquirido otro popular desarrollador indie. Esta vez se trata de Campo Santo, el desarrollador que está detrás del exitoso simulador de senderismo Firewatch. El movimiento sorpresa se ha anunciado hoy a través del blog oficial del antiguo estudio indie, revelando que todo el equipo de 12 personas trabaja ahora bajo el techo de Valve en Bellevue.
Este tipo de adquisiciones son bastante comunes en la industria de los videojuegos, al igual que las previsibles predicciones catastrofistas sobre la consolidación corporativa que las siguen. Uno de esos episodios de histeria pública fue la idea de que empresas como EA y Microsoft querían comprar Valve, y los jugadores se asustaron.
Campo Santo sigue trabajando en sus juegos, su nuevo juego, In The Valley of The Gods, sigue en desarrollo. El ahora desarrollador indie también está trabajando en un port para Switch de Firewatch. La compañía quiere asegurar a los fans que seguirán desarrollando y apoyando sus juegos hasta bien entrado el futuro, así que dejad las horcas.
Aquí está el mensaje completo de Campo Santo:
Los doce integrantes de Campo Santo hemos acordado unirnos a Valve, donde mantendremos nuestros puestos de trabajo como desarrolladores de videojuegos y continuaremos la producción de nuestro actual proyecto, In the Valley of Gods.
Si eres el tipo de persona a la que le importa un bledo esta noticia, podemos explicar un poco más esta gran decisión. En primer lugar, nos gusta mucho hacer videojuegos. Además, y quizás más exactamente, nos gusta mucho hacer y producir entretenimiento. Desde la producción diaria de nuestro último juego, Firewatch, hasta la forma en que dirigimos la empresa, fabricamos productos, nos reunimos con los jugadores en exposiciones y ferias, enviamos una revista literaria trimestral, hacemos demostraciones de juegos abiertas al público en medio de un bosque artificial… todo está orientado a sorprender, deleitar y entretener a los clientes que han compartido nuestro éxito.
En Valve encontramos un grupo de personas que, en el fondo, sienten lo mismo por el trabajo que hacen (esto, te sorprenderá saber, no ocurre todos los días). En nosotros, encontraron un grupo con una experiencia única y perspectivas valiosas y diversas. La coincidencia se hizo rápidamente evidente.
En segundo lugar, mientras visitábamos la sede de IGN a principios de 2015 para hablar de Firewatch, nos encontramos con un premio al Juego del Año de 2011 por Portal 2 que no se había entregado. Resulta que estaba grabado en una botella de champán sin abrir. Como nunca dejamos pasar el alcohol gratis, lo robamos y nos lo bebimos para celebrar el lanzamiento de Firewatch un año después. Así que, en cierto sentido, esto es un regreso a casa para nosotros. Bueno, por esa botella de champán.
En tercer y último lugar, tuvimos una serie de largas conversaciones con la gente de Valve y todos compartimos la satisfacción que nos produce trabajar con gente cuyo talento empequeñece el nuestro para hacer cosas que nunca creímos posibles. Ambas partes hablaron de nuestros valores y de cómo, a la hora de la verdad, nosotros, como seres humanos, estamos muy limitados por el tiempo que nos queda cuando se trata de hacer las cosas que nos importan y en las que creemos. Nos preguntaron si estaríamos interesados en ir a Bellevue y hacerlo allí y dijimos que sí.
Sí, seguiremos haciendo In the Valley of Gods (¡como juego de Valve!); sí, seguiremos apoyando a Firewatch; y sí, seguiremos produciendo The Quarterly Review y el contenido habitual de nuestro blog. Muchas gracias por vuestro interés en nuestros juegos y nos vemos en Washington. Saludos.
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